Los bienes de inversión son aquellos gastos que se realizan en productos que van a tener un uso en la actividad económica que será superior al año. Por ejemplo, si te compras un ordenador se presume que lo podrás usar para tu trabajo durante una media de 4 años.
Recuerda que para ser bienes de inversión deben:
Tener una vida útil superior a 1 año
Encontrarse 100% afectos a la actividad económica
Ser imprescindibles para su desarrollo
¿Qué significa que un bien tenga que estar “afecto” a la actividad económica?
Cuando hablamos de que un gasto o un bien de inversión debe estar “afecto” a la actividad queremos decir que debe ser usado única y exclusivamente para el desarrollo de la misma. Es necesario que nosotros tengamos claro el grado de afección para aplicar de forma correcta las normas fiscales respecto de las deducciones en función de cada impuesto.